Haciéndome eco de un artículo de La Vanguardia y estando ya por el tercer y último libro de esta apasionante saga «Millenium» puedo confirmar que sí, engancha y mucho. ¿Por qué? Pues porque mantiene la intriga en cada línea y los acontecimientos se van sucediendo de un modo sencillo pero atrayente. En definitiva, te mantiene en tensión todo el rato y eso es lo que hace de estos tres libros un relato vivaz, intrigante y la vez emocionante.
Los Hombres que no amaban a las mujeres comienza con varias historias paralelas, pero ya sobre la página 100 comienza una intriga que no cesará hasta el final del mismo. Aunque quedan historias en el aire, los conflictos importantes se resuelven. Pero luego llega la segunda parte: La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina. Desde el principio los hechos discurren del modo más atrayente y no te puedes despegar de este maravilloso libro porque la intriga te corroe y cuando llegas al final te quedas paralizado porque se acaba en el punto álgido de una historia clave. Recuerda a los capítulos de las series que se acaban en el momento más importante y pone «continuará…». Eso no se hace, y más en mi caso que me tuve que esperar dos días para comprar el tercero. En fin…
Por último, La reina en el palacio de las corrientes de aire que lo estoy empezando y una vez lo termine ya transmitiré mi opinión que adivino será muy buena ya que las espectativas están muy altas y Stieg Larsson ha dejado una obra inmejorable para los amantes del thriller literario.
Mikael Blomkvist, Lisbeth Salander, la revista Millenium… TODO UN BOOM LITERARIO!!!!